Por experiencia he podido comprobar que, frecuentemente, las personas que acuden a mí no están preparadas en ese momento para afrontar en las mejores condiciones posibles un RETO, en cualquier área de su vida, por diferentes motivos:
No saben lo que quieren exactamente.
Están atravesando un momento difícil.
No se sienten con la suficiente confianza
Su autoestima está baja,…
Por esta razón es tan importante trabajar primero psicológicamente, para “empoderarte”: sacar todo lo bueno que tienes y quitarte telarañas del pasado, sanando heridas para que no vuelvan a supurar.
Antes de definir tu meta/objetivo/reto, antes de emprender el camino hacia delante, de presente a futuro (que es básicamente la etapa “Coaching”), puede ser necesario mirar atrás, pero SOLO EN POSITIVO:
Para entender cómo has llegado hasta aquí y quién eres ahora, con tus fortalezas y tus debilidades.
Con el fin de traernos al presente aquellos recursos que utilizaste y te ayudaron y que ahora tienes olvidados.
Para extraer aprendizajes positivos de aquellos momentos duros que viviste y almacenaste de forma dolorosa y que pueden estar bloqueándote en el presente.
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